Esta mañana, la Mesa Técnica de Trabajo de la Industria Farmacéutica, liderada por SOFOFA, dio a conocer un estudio sobre el impacto económico y social sectorial. Información inédita, que permitirá promover el desarrollo de una actividad estratégica para el país, según ha quedado de manifiesto en el contexto de la actual crisis sanitaria.
“La conformación de la mesa de trabajo y el estudio que hoy presentamos revelan la importancia que hoy tiene la industria farmacéutica y la necesidad de incentivar la investigación y aumentar la colaboración con distintas instituciones en beneficio de las personas, en particular, acceder a medicamentos y tratamientos médicos en forma oportuna”, comentó Rafael Palacios, director de Políticas Públicas de SOFOFA, quien lideró el trabajo.
Constituida a fines de 2019, en un hecho inédito, en la mesa están representados todos laboratorios, agrupados en PROLMED, CANALAB, ASILFA y la CIF, y que como primera actividad encargó a Rodrigo Harrison y José Antonio Carrasco, ingenieros de la Universidad Adolfo Ibáñez, realizar un estudio que permitiera perfilar esta industria en nuestro país.
Industria en cifras
“Impacto de la Industria Farmacéutica en Chile: The Economic Footprint” reveló que “las exportaciones de la industria son fundamentalmente de alta tecnología, con inversiones significativas en I+D”. Los envíos al exterior alcanzan a US$170 millones anuales, fundamentalmente en manufacturas de alta tecnología, que envía a más de 58 países en los cinco continentes. De esta manera, contribuye en total con más de $1.200 miles de millones en productos de valor agregado, equivalente a 0.82% del total nacional. Indirectamente, tiene impacto significativo en más de diez sectores distintos, totalizando $812 miles de millones.
Cada año, emplea directamente a cerca de 15.000 personas, equivalente al 2% de la industria manufacturera; casi la totalidad son trabajadores dependientes con contrato; en promedio alcanzan un salario mensual superior a $1.300.000, uno de los más altos de la industria manufacturera, y 49% de la fuerza laboral está representada por mujeres. Su productividad, a su vez, es similar a la industria de transportes, comunicaciones e información. Indirectamente, genera más de 68 mil puestos de trabajo formales.
Mejor calidad de vida
“La evidencia empírica muestra que un sector farmacéutico moderno, que promueve la innovación en nuevos medicamentos, incide positivamente en la esperanza de vida e incluso en menores costos de tratamientos médicos”, comentó Harrison en atención al impacto social de la industria. De acuerdo a la información disponible, la innovación farmacéutica ha permitido aumentar la esperanza de vida en promedio en 0,8 años entre 1986 y 2000 y en 1.27 años entre 2000 y 2009, explicando entre el 40% y el 73% del incremento en la esperanza de vida total.
Asimismo, “por cada dólar que se invierte en el desarrollo de nuevos medicamentos es posible alcanzar ahorros entre US$2,4 a US$8,3 en costos sanitarios directos, particularmente en hospitalizaciones y visitas médicas, que según los expertos lleva a la necesidad de implementar política públicas que promuevan la innovación”, aseveró.
Revisa el estudio aquí.
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